Todo parece empezar bien, compro una entrada, perdón mas bien dos, por que tengo que ir con acompañante, es decir aunque yo pague la de niño tengo que pagar además la de adulto.
Pero eso es lo de menos, Tampoco hay personal que te ayude a subir y bajar de las atracciones, la ventaja única que veo es que no tengo que hacer las colas. Lo serio empieza cuando llegas a las atracciones mecánicas. A pesar de que no puedo valerme por mi mismo, si me gusta subirme en las atracciones y cuantos más fuertes y vertiginosas sean mejor.
Claro que voy muy poco a ese parque y cuando voy, han cambiado muchas cosas, sobre todo en la zona de las maquinas que es en la que yo mejor me lo paso, esta vez lo mejorcito era:
La Tarántula
La maquina
El abismó (Novedad)
El tornado
La lanzadera
Señores de las cinco de mi lista solo pude subirme en tres, mucha gente pensara que 3 de 5 no es poco, pero es poco cuando se le quita las cadenitas y otras que marean muchísimo. El motivo que nos dieron fue que no podía por temas de seguridad, como nos explicaron en el parque el encargado, al tratarse a atracciones como puede ser La Tarántula o El Tornado No cuentan con otro sistema de seguridad para bajar a la gente en caso de avería, que no sean las escaleras. Por miedo a que pudiera averiarse el encargado del parque me prohibió la entrada a esas atracciones.
Pero por otro lada me dejaron subir a una mas peligrosa y que yo diría que en caso de avería lo tendríamos mucho mas difícil para poder bajar.
En fin supongo que estoy en una silla y no puedo hacer otras cosas que dar la vuelta y probar suerte en las otras Ej. El Abismo que si me dejaron que diera unas vueltas.
“Señores si tienen la suerte de estar en una silla de ruedas cuando salgan al parque de atracciones de Madrid no se olviden del acompañante ni del helicóptero para disfrutar de las atracciones sin miedos”
